El consumo de tabaco cobró la vida de 8 millones de personas durante el 2020, casi tres veces más que el número de defunciones en poco más de un año del inicio de la pandemia por coronavirus Covid-19.
Ante esto, la Organización Mundial de la Salud hizo un llamado a los gobiernos de todo el mundo para hacer un aumento en los impuestos de estos productos para que éstos fortalezcan los sistemas de sanidad fuertemente golpeados por la pandemia.
“Ánimo a los políticos a ser valientes y a no tener miedo a la industria del tabaco. Deben hacer lo que más inteligente, subir los impuestos a estos productos“, declaró el coordinador de la Unidad de Economía del Control del Tabaco de la OMS, Jeremias Paul Jr.
De acuerdo con la OMS, el consumo de tabaco genera pérdidas anuales de 1.4 billones de dólares (más de 27 billones de pesos) por los gastos en el sector salud que se ocasiona y que hoy se necesitan para hacer frente a la pandemia.
Para Jeremias Paul Jr con el aumento en los productos de tabaco al menos un dólar se podrían obtener cerca de 200 mil 000 millones de dólares de ingresos adicionales por concepto de tasas.
“Los costos económicos y humanos del tabaco están en aumento, 8 millones de personas murieron por el tabaco el año pasado“, confirmó Jeremias.
Por su parte, la OMS aseveró que el problema es principalmente político, por lo que lanzó un manual técnico con recomendaciones para reducir los gastos que origina el tabaco a las arcas públicas con la esperanza de que este sea una herramienta para que los políticos se den cuenta de la importancia de tomar medidas en este sentido.
Cabe destacar que los impuestos al tabaco en 2018, último año del que se tienen cifras globales, se elevaron a 361 mil 000 millones de dólares, frente a los 1.4 billones de dólares de gastos de salud que originó.
Asimismo, actualmente sólo 38 países, los cuales apenas son el 14 por ciento de la población mundial, aplican una tasa de impuestos de al menos el 75% del precio de los productos de tabaco, lo que la OMS considera pertinente.
Fumadores en México y la nueva reforma
En el país hay al menos 15 millones de fumadores que se verían afectados ante una nueva propuesta del dictamen para reformar la General para el Control del Tabaco que amenaza con prohibir la importación, exportación fabricación y venta de todas las nuevas alternativas al cigarro convencional que podrían tener menor riesgo de daño para el consumo de tabaco y nicotina.
De acuerdo a la OMS, cerca de 780 millones de consumidores desean dejar de fumar, aunque apenas el 30 por ciento de ellos tiene acceso a medios para conseguirlo, por lo que esta nueva reforma podría impedir la existencia de otras alternativas.
Una investigación realizada por la agencia Povaddo, la cual indica que 8 de cada 10 mexicanos encuestados consideran necesario que los consumidores de cigarros reciban toda la información sobre alternativas libres de humo, sin malos olores y sin cenizas.
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Para Andrzej Dabrowski, CEO de Philip Morris México, estas alternativas ayudarían a los ciudadanos a decidir de manera responsable, con información científica y objetiva, para dejar el cigarro y sería una contribución innegable a la salud pública.
Es importante señalar que, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), fumar aumenta más de 20 veces los riesgos para desarrollar enfermedades asociadas como cáncer de tráquea, bronquios y pulmón, dependiendo del número de cigarros fumados por día y del número de años de fumador.
Asimismo, la edad de inicio de consumo de tabaco en el país es apenas entre los 10 y 12 años de edad, de los que el 12 por ciento comienza a hacerlo por curiosidad o imitación; mientras que el 17 por ciento de los adolescentes consume tabaco de forma regular, lo que ha provocado un aumento en las enfermedades pulmonares.
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