Los tiempos están cambiando y evolucionando, por lo que muchos hábitos que en algún momento eran tradicionales y comunes, ya no son del todo aceptables. Pongamos por ejemplo que antes lo más normal era que la hija menor no debía casarse porque se consideraba que su responsabilidad era cuidar de los padres en su vejes.
Hoy existen diversas parejas, en especial jóvenes, que prefieren vivir en unión libre en lugar de contraer matrimonio. Existen muchas razones por las que esta práctica está perdiendo credibilidad en la sociedad.
De acuerdo con un estudio realizado por el Gabinete de Comunicación Estratégica GCE a mil 200 personas. El 64 por cientos dijo que prefería vivir en matrimonio, 20 por ciento por unión libre, 10 por ciento que cada quien viva en su casa y 6 por ciento no supo responder.
De estos fue la mayoría de adultos mayores de 30 años fueron los que señalaron que preferían el matrimonio. Representando el 66 por ciento.
Pero ¿Realmente se están casando tantas personas?
De acuerdo con cifras del INEGI los matrimonios registrados muestran que hubo un aumento anual de 2010 a 2012. Sin embargo, a partir de ese año empezó a descender la cifra, aunque en forma moderada en los siguientes dos años, de 2014 a 2017 el decremento fue de 15 mil y 20 mil anualmente.
Por otra parte, los divorcios han mostrado un incremento, en 2010 se registraron 86 mil, para el 2013 este aumento a 109 mil y en 2017 fue de más de 147 mil.
El INEGI asegura que esto se debe a que cada vez más personas deciden vivir en unión libre.
Pero no solo se ha presentado un cambio radical en la estructura del matrimonio también el concepto de formar una familia empieza a ser descartada por algunas parejas, pues según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía desde hace una década los nacimientos han disminuido un 17 por ciento.