Pero, ¿qué opinan los periodistas que realizaron este trabajo de investigación al respecto?
Dentro de las complicaciones a las se vió expuesto el equipo de investigación se encuentra la comunicación, ya que tuvieron que hacer uso de una traductora, pues la lengua que se habla en la zona es Mixteco. Posteriormente, al siguiente obstáculo que se enfrentaron fueron las largas distancias entre municipios, ya que se debe pasar hasta ocho horas en automóvil.
Sin embargo, la venta de niñas y el machismo que se vive en la comunidad de Metlatónoc, era un tema que los jóvenes periodistas deseaban dar a conocer.
“La mujer indígena tiene muchísimo de perder, y estoy seguro que hay muchos casos que no se dan a conocer por lo hermética que es la comunidad”, comentó Amézquita.
Además, aseguró que dentro de la comunidad se viven condiciones muy desfavorables para las mujeres, ya que son vistas como objetos, e incluso al ser compradas, deben de seguir las reglas de la nueva familia a la que se integran, así como servir a la familia o hacer labores del hogar.
Y aunque esta tradición es muy conocida en la zona, se habla poco sobre ello, y se negocia “bajo el agua”, así lo relató el periodista.
“El problema de la violencia de género impera en todo el país, aunque me parece que la mujer indígena las tiene más de perder, no tienen apoyo de las mismas autoridades”.
También recalcó que las indígenas tienen una situación mucho más desfavorable por el sistema en el que se encuentran inmersas, donde la pobreza, la la violencia de género estructural, así como el poco apoyo de las autoridades, terminan por hacer mucho más complicada la situación para ellas. Y por eso mismo se debe de dar a conocer su situación.
“Como son comunidades tan cerrada, no se visibiliza el tema”, expresó Amézquita.
Otro de los grandes conflictos del reportaje fue la molestia que causó en la comunidad, la cual pidió que se encarcelará a la traductora que ayudó a los periodistas y que los jóvenes emitiera una disculpa pública, ya que el reportaje tuvo mucho más alcance del esperado, al punto de llegar a presidencia.
Sin embargo, fue el mismo presidente quien defendió la tradición.
“Es necesario poner en agenda este problema y me parece lamentable que el presidente lo haya minimizado”, dijo Axel Amézquita.
La venta de niñas en Guerrero es una realidad, y será necesario poner sobre la mesa temas incómodos para comenzar a ver a las mujeres que sufren de violencia estructural.
“Yo esperaría que legislen leyes para proteger a las mujeres indígenas, y que no solamente ocurre en esta comunidad (…) tenga protección”, comentó Axel Amézquita.