Este martes se dio a conocer la salida del Manchester United del entrenador portugués Jose Mourihno tras dos años y medio al frente del equipo; la gota que derramó el vaso fue la derrota del domingo pasado en contra del Liverpool por marcador de 3 tantos a 1.
Una vez anunciada la salida del oriundo de Setúbal, diversos reportes de prensa indicaron una serie de anomalías en su relación con algunos jugadores de la plantilla, el más notorio Paul Pogba, además de que incluso las acciones del ManU mostraron un repunte del 3.8 por ciento en la Bolsa de Nueva York.
Mourinho es uno de los técnicos con mayor prestigio a nivel mundial, sin embargo, tiene años que no logra llegar a lo más alto de la élite europea.
A pesar de que con el equipo británico tenía un porcentaje de victorias superior al 50 por ciento, su mandato registró el peor inicio de la institución deportiva desde los inicios de la década de los 90.
De tal modo que el entrenador que logró campeonar con todos los equipos que había dirigido en cuatro diferentes ligas, multiganador de Champions y un tipo franco que pone por encima al equipo por sobre las grandes figuras, necesita una etapa de reposo.
Despejar su mente, realizar un ejercicio de autocrítica y alejarse de la tensión de estar frente a un banquillo le permitirá renovarse, puesto que dentro de los textos relacionados con su salida, se argumenta que puede que el director técnico no fue capaz de reinventarse, lo que tendría consecuencias negativas en el próximo equipo que lo contrate.
