Hay que imaginar un escenario. Una persona siempre ha querido invertir en bienes raíces. Sabe que es una gran herramienta financiera, ya que es de buen rendimiento y alta seguridad. También supo cómo contratar un crédito hipotecario de forma que no afectara su patrimonio. Asimismo, revisó que la obra donde puso su dinero tenía todas las condiciones adecuadas. Pero a la mitad de la iniciativa, empieza a sentir que no es tan buena como creía al inicio.
Aunque se trata de una posibilidad remota, de todas formas es posible. Según Alejandro Erhard, Broker de RE/MAX PyV en Monterrey, Nuevo León, hay muchas razones por las que una persona podría querer retirar su inversión en bienes raíces. Pero independientemente de estos factores, recuperar el dinero debería ser un proceso sencillo. Al menos, en teoría.
¿Alguna ves les ha tocado que un inversionista les diga: ‘quiero retirar el dinero que te di para que lo invirtieras’? ¿Qué les contestas? Lo primero sería: ¿por qué te quieres retirar, qué paso? Luego, ¿qué te contestaría?: lo necesito, lo ocupo para una emergencia, me salió otra mejor inversión. La devolución realmente no debería ser un problema. Pero si lo es, depende de en qué lo estén invirtiendo. La gama de diferentes productos de inversión inmobiliaria es muy amplia, cada una de ellas tiene una característica diferente.
¿Cómo recuperar una inversión de bienes raíces?
El experto de RE/MAX señaló que, para los profesionales inmobiliarios, debería ser una señal de alerta que los inversionistas quieran retirarse. Apunta que un buen proyecto de bienes raíces, donde se genere utilidad, no provocará la salida de las personas. Al contrario, afirma, los motivará a destinar todavía más dinero. Por otro lado, apunta que las personas que quieran salirse de un desarrollo deben estar plenamente consciente de sus obligaciones legales.
Lo más importante es qué tipo de compromiso se estableció en el contrato. Asociación en participación, de administración, de capital semilla, aportación, retorno en especie, en un tiempo definido, con una penalidad o con un castigo por salir antes del término. [Se debe revisar] qué se dijo, qué se puso, qué se acordó, cómo se puede o no salir. […] Vuelves a lo mismo: qué dice el contrato y cuál es el compromiso de [desarrolladores e individuos].
O sea aquí es donde tenemos que saber recibir inversiones, cómo las recibimos y a qué nos comprometemos nosotros y ellos también a qué se comprometen; pues el que se quiera retirar es válido o no. Ahora si tu proyecto no está funcionando claro que quieren retirarse, hasta tú te quieres retirar pues no está saliendo el negocio.
Si se quiere salir yo lo dejaría que saliera, pero no gratis, el que se raja pierde. A menos que esté establecido que se puede salir sin penalidad. Siempre debemos estar preparados para estas contingencias y saber qué vamos a hacer. Pero si el negocio es bueno, está dando y hay utilidad, aseguro que no se saldrán; al contrario, querrán invertir más. Entonces lo que hay que hacer es generar buenos resultados a nuestros clientes.
