Hace 15 años, la vida de Melissa Lucio dio un giro inesperado. Mariah, su hija de dos años, jugaba en las escaleras de su casa cuando cayó abruptamente.
Este lunes, la Corte de Apelaciones Penales de Texas concedió una suspensión a la ejecución de Melissa Lucio, así lo informaron sus abogados en un comunicado. De esta manera ,su procedimiento queda frenado para el miércoles 27 de abril. Tanto la mujer de 53 años como su familia, defensores y abogados dicen que la condenaron injustamente por homicidio calificado.
“Doy gracias a Dios por mi vida. Siempre he confiado en él (…) Estoy agradecida de que la corte me haya dado la oportunidad de vivir y demostrar mi inocencia. Mariah está en mi corazón hoy y siempre”, dijo.
De acuerdo con medios locales, en el juicio, los fiscales argumentaron que Melissa Lucio era una madre abusiva que probablemente causó las lesiones que llevaron la muerte de su hija. Sin embargo, Lucio y sus abogados aseguraron que las heridas de Mariah no se debieron a un abuso, sino a una caída por una escalera del apartamento del segundo piso de la familia, dos días antes de su muerte.
CASO DE MELISSA LUCIO
Hace 15 años, la vida de Melissa Lucio dio un giro inesperado. Mariah, su hija de dos años, jugaba en las escaleras de su casa cuando cayó abruptamente; al encontrarla su madre, Melissa, la menor estaba llorando y con algo de sangre en los dientes, pero al ver que no tenía otras heridas, no se alarmó. Sin embrago, dos días después, Mariah murió mientras dormía.
Tras esta hechos, Melissa Lucio fue condenada a muerte en 2008, acusada de negligencia, además de golpear y torturar a la menor. Lo ocurrido en el condado de Cameron, en Texas, Estados Unidos, voló a nivel mundial, pues el tribunal se basó en una confesión que Lucio dio durante un interrogatorio policial de cinco horas, en donde apuntó: “No sé lo que quieran que diga. Supongo que soy la responsable”.
“En el lugar de los hechos, Lucio dijo a los paramédicos que Mariah se había caído por las escaleras días antes, pero uno de los socorristas se mostró escéptico, según la petición de clemencia, porque la residencia era de un solo piso con unos pocos escalones al frente. No entendió, dice la petición, que la niña se había caído en la casa anterior de la familia”, refiere CNN.
A todo esto, el 27 de abril estaba programada su ejecución. De proceder, Melissa Lucio, de 52 años, hubiera sido la primera latina en ser ejecutada en Texas y al primera mujer desde 2014. Un elemento importante a considerar, es que sólo 17 mujeres han sido ejecutadas en Estados Unidos desde que la Corte Suprema levantó su prohibición a la pena capital en 1976, la más reciente en enero de 2021.
“Será un error histórico e irreversible por parte del Estado de Texas si seguimos adelante con esto (…) Nunca he visto un caso más preocupante que el de Melissa Lucio”, sostuvo el representante estatal Jeff Leach, un republicano del norte de dallas que ha sido una de las principales voces en Texas que insta a detener la ejecución.