De acuerdo a cifras colectadas por el festival gastronómico vegetariano mexicano el 20 por ciento de la población ha decidido incluir tendencias vegetarianas o veganas a su día a día. Ya sea por cuestiones de salud, cuidar el medio ambiente o por defender los derechos de los animales.
De hecho, según el portal youngwomenshealth, existen diferentes tipos de vegetarianos o veganos, como; el flexitariano, que evitan productos animales, pero a veces comen pescado o carne, o los pesavegetarianos, que comen pescado, lácteos y huevo, pero no carne.
También existen los lacto-ovo vegetarianos, que, si come lácteos y huevos, pero no carne, muy similar a los lactoveganos que consumen leche pero huevos no, ni carne.
Por otra parte, están los ovo-vegetarianos que si consumen huevos pero no lácteos ni carnes y los veganos que no consumen ningún producto derivado de animales o carnes.
Y sucede que una vida vegetariana tiene ventajas como evitar enfermedades del corazón o sufrir de diabetes. Pero también puede ser perjudicial si no se consume una gran variedad de frutas, vegetales, y granos enteros, ricos en vitaminas y nutrientes, además de minerales como el hierro y el calcio.
Por eso te damos algunas recomendaciones para que no arriesgues tu salud:
El zinc es muy importante para el crecimiento y reforzar el sistema inmune, este lo podemos encontrar en granos, cereales fortificados, productos lácteos (leche de soya, leche de almendras o leche de coco) o legumbres. Consumirlos también nos ayudara a que nuestro cuerpo produzca vitamina D y vitamina B12.
Por otra parte, el consumir nueces, semillas de lino, aceites de canoja, aguacate, soya, tofú y aceite de oliva son alimentos ricos en omega 3 y podremos obtener grasas sanas de ellos. Los carbohidratos que ayudan al cerebro y los músculos los podemos conseguir en el trigo entero, pastas, tortillas, arroz integral, bulgur y quinoa.
Para el hierro y el calcio debemos incluir frijoles negros y blancos, semillas, soya, cereales, hojas de vegetales verdes (como la espinaca), brócoli, calabaza verde, tofu y sobre todo citricos como jitomate, naranja o toronjas.
Anexo a todo esto es importante el consumo de sal que nos proporciona yodo para mejorar nuestro metabolismo, este también lo podemos encontrar en las algas marinas.