Sin tocar a feligreses imponen signo en la alcaldía de Xochimilco, así como lo recomendaron las autoridades del Gobierno de la Ciudad de México, la ceniza se entrega en bolsita de plástico.
El COVID-19 cambió el estilo de vida de millones de personas en todo el mundo, incluyendo los creyentes católicos. Para no perder esta tradición, en la Catedral de San Bernardino de Siena en el corazón de Xochimilco, los feligreses recibieron la ceniza en bolsitas de plástico para llevárselas a sus hogares.
Aunque la afluencia a los recintos religiosos fue baja en comparación con años los anteriores, se respetaron en todo momento las medidas sanitarias; desde el ingreso con cubrebocas obligatorio, toma de temperatura y aplicación de gel antibacterial.
El padre José Alberto Medel Ortega, canciller de la Diócesis de Xochimilco, informó que dentro de los recintos se siguieron todas las medidas sanitarias vigentes; asimismo, a quienes acudieron se les esparció la ceniza en la cabeza sin tocarles la frente como se solía realizar este ritual que marca el inicio de la Cuaresma.
Por otra parte, quienes se quedaron en casa pudieron seguir a través de internet, la celebración de la misa.