Miriam Rodríguez se dedicó a un solo objetivo: encontrar a los asesinos de su hija Karen Salinas y llevarlos uno a uno, tras las rejas.
La Civil de Teodora Mihai, es una historia que relata la historia de una adolescente, interpretada por Denisse Azpilcueta, quien es secuestrada por el Cártel del Norte en México. Ante ese hecho, su madre Cielo, bajo el protagonismo de Arcelia Ramírez, inicia su propia investigación para esclarecer la desaparición de su hija, misma que luchará contra las estructuras machistas y sus propios miedos, hasta dar con su paradero o por lo menos, con los responsables de su rapto. En un inicio el proyecto estaba enfocado para ser un documental, pero la idea de Teodora cambió cuando conoció a Miriam Rodríguez, una mujer de la vida real que hizo todo lo posible para encarar a 10 de los hombres implicados en el asesinato de su hija Karen Salinas.
Karen Alejandra Salinas Rodríguez desapareció a los 16 años en enero de 2014, en el municipio de San Fernando, Tamaulipas, donde vivía. Ella se encontraba a bordo de su vehículo cuando varios sujetos le bloquearon el paso y se la llevaron secuestrada. Sin embargo, después de cobrar varios rescates a cambio de su libertad, la menor fue asesinada. Tras ese hecho lamentable, Miriam Rodríguez se dedicó a un solo objetivo: encontrar a los asesinos de la menor y llevarlos uno a uno, tras las rejas.
Con información de medios, desde 2014 la mujer pasó de sus actividades cotidianas a armarse con una pistola, tarjeta de identificación falsa y disfraces. En resumen, se convirtió en una detective que desafió a un sistema en el que suele prevalecer la impunidad criminal. Miriam se hizo pasar por encuestadora, trabajadora de salud y funcionaria electoral para conseguir los nombres y direcciones. Inventó excusas para conocer a sus familias; se relacionó con las abuelas y los primos que sin saber, le proporcionaban los más mínimos detalles de los asesinos de Karen. Por ejemplo, uno de ellos antes de unirse al cártel de los Zeta e involucrarse en el secuestro de su hija, vendía flores en la calle.
En tres años, esta madre con sed de justicia, capturó a todos los implicados en el rapto de Karen; uno ya había renacido como cristiano, otro era taxista, otro se dedicaba a la venta de coches y uno era niñera. A todo esto, Miriam había solicitado al gobierno algún tipo de protección con escoltas armados, temiendo que el cártel le hiciera algo.
Sin embargo, en marzo de 2017 más de 20 presos se escaparon del penal en Ciudad Victoria, en Tamaulipas, donde estaban los asesinos de Karen; tres de ellos acudieron a su domicilio a asesinarla. Así, semanas después de haber perseguido a uno de sus últimos objetivos, el 10 de mayo, justo en el Día de las Madres, la mataron a tiros frente a su casa.
DESAPARICIONES EN MÉXICO
Desde la década de los 60, en México las desapariciones ya rebasaron las 100 mil personas. Con Calderón sumaron 16 mil 897, con Peña Nieto 35 mil 92, mientras con López Obrador, que lidera la Cuarta Transformación, lleva al momento bajo su solapa 31 mil 271.
“La maquinaria de las desapariciones mantiene un ritmo imparable: cada día entre el 1 de diciembre de 2006 y el 3 de mayo de 2022, cada uno de esos días, un promedio de 15 personas han desaparecido de manera inevitable”, refiere el medio especializado en investigaciones, Quinto Elemento Lab.
En la lista total de 100 mil personas desaparecidas, 63 por ciento de los municipios del país han sido alcanzados por la mancha de la desaparición: en mil 574 municipios, al menos una persona fue reportada como desaparecida y sigue sin ser localizada. Cinco de los municipios más afectados al tener más de 2 mil registros son: Guadalajara y Zapopan, en Jalisco, así como Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo, en Tamaulipas.