Correr bien no es algo con lo que se nace. El runner debe tener en mente que realizar la actividad adecuadamente es algo que se aprende.
Los expertos saben que no todos saben que no deben rebotar mucho, alargar las zancadas, aterrizar muy fuerte, atender el tendón de la corva, etcétera. Por ello existen indicaciones que puedes seguir para que cuando corres el ejercicio sea realmente efectivo.
Pisada. El contacto con el suelo debe realizarse con la bola del pie con los dedos apuntando hacia adelante, suavemente y evitando que el talón toque el suelo mientras se realiza el ejercicio.
Postura. Las rodillas deben estar levemente dobladas y el pie debe plantarse debajo de las caderas. Los hombros y brazos deben estar relajados, las caderas también. La cabeza debe estar levantada hacia delante. Las manos, con las palmas hacia adentro, no hacia abajo o cerrando el puño, pero con el pulgar sobre el índice.
Posterior a correr
Duerme, pero descansa bien. Las personas suele menospreciar el descanso pero no dormir bien engorda, primero porque favorece el apetito y la ansiedad y después porque favorece que la grasa permanezca en el organismo.
Duerme con la luz apagada y la tele desconectada. Investigadores del Instituto Nacional de Ciencias de la Salud y el Medio Ambiente, en Carolina del Norte, revelaron que expuestas a luz artificial durante el sueño, tuvieron 17 por ciento de mayores probabilidades de subir cinco kilos o más durante el lapso del estudio.