“Otro les hubiera tirado un balazo”, relata joven en Twitter el maltrato que sufrió por parte de policías de la CDMX por ser homosexual
Amaro Bautista, un joven homosexual que reside en la Ciudad d eMéxico relató su historia de terror que vivió en la Roma sur, donde unos policías lo golpearon al igual que a su pareja, demostrando la intolerancia y violencia que vive la comunidad LGBT a diario.
“Hoy besé a un hombre, nos escondimos en la obscuridad de un parque para besarnos más, pero el odio a esos dos jotos terminó con un par de policías correteándonos, golpeándonos y extorsionándonos. Ahí en plena Roma Sur. En la ciudad más LGBTIQfriendly de México”, escribió.
Hoy besé a un hombre, nos escondimos en la obscuridad de un parque para besarnos más, pero el odio a esos dos jotos terminó con un par de policías correteándonos, golpeándonos y extorsionándonos. Ahí en plena Roma Sur. En la ciudad más LGBTIQfriendly de México.
— Amaro Bautista (@chula_zapata) April 7, 2022
Siguió con su relato en un hilo de Twitter:
“Los policías llevaban un rato siguiéndonos en su patrulla, como si estuviéramos haciendo algo malo. Ingenuas nosotras nos escondimos para besarnos, pero eso terminó en un miedo terrible. Por un momento dije: “quizá seremos dos desaparecidos más”.
“Corrimos, nos caímos, nos raspamos, nos golpearon, nos querían sembrar droga. Mi amigo y yo nos acariciábamos las manos, como diciéndonos “todo va a estar bien”, pero la verdad es que lo único que existía era “nos van a desaparecer”.
El usuario en Twitter compartió el miedo que sintió ante la rpesencia de los policías, quienes decidieron darles un sermón de conportamiento.
“Uno de ellos “se compadeció” y comenzó a darnos un sermón homofóbico: “tengo un sobrino como ustedes y él no anda haciendo eso en la calle, se va a un hotel, todos queremos coger pero para eso hay lugares”. Nosotros entre enojados y con miedo sólo intentamos salir de allí”.
El joven narró que tuvo que dar dinero y algunas pertenencias para que lso dejaran ir.
Dimos dinero, unos lentes que llevaba y con esas cosas tmb se fue mi confianza. Un policía, “el bueno”, todavía nos puso alcohol en las heridas mientras nos amenazada: “de quién fue la idea de correr, para chingarlo y al otro dejarlo libre”, pero las jotas no nos abandonamos.
Finalmente cierra su relato expresando su derecho a decidir y demostrando la homofobia que aún existe en la sociedad mexicana.
Rabia, enojo y miedo; afortunadamente sólo me duelen levemente las costillas pero quizá pudo haber llegado a más. No fue así. Lo que sé es que ahora no dejaré de besarme en las calles de esta ciudad llena de policías homofóbicos. Los cuáles todavía se atrevieron a decir:
“Otro les hubiera tirado un balazo”. Y eso me deja con miedo pero tmb con fuerza para seguir siendo un jotx visible, un jotx que no dejará de besarse con todos lxs jotas que me cautiven en las calles de esta ciudad.
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Desgraciadamente los derechos de la comunidad LGBT+ se siguen violentando, creando temor en las personas para expresar su identidad con libertad. De acuerdo con la Encuesta sobre Discriminación por motivos de Orientación Sexual e Identidad de Género, el 92% de los adolescentes LGBT tuvieron que esconder su orientación sexual y/o identidad de género de su familia.
La comunidad LGBT+ debe ocultar su orientación sexual por temor, por lo menos durante los primeros años de su vida. Lo cual afecta directamente a su calidad de vida en todos los sectores donde se desarrollan como la escuela, trabajo y relaciones personales.
Según con las cifras de la 2nda Encuesta Nacional Sobre Violencia Escolar Basada en la Orientación Sexual, Identidad y Expresión de Género Hacia Estudiantes LGBT en México, tres de cada cuatro estudiantes LGBT fueron víctimas de acoso verbal por su orientación sexual.
Además en México seis de cada diez personas LGBT+ consideran que su orientación sexual ha sido un obstáculo para acceder a un empleo y el 70% de los mexicanos que pertenecen a la comunidad han dicho que no reciben el mismo trato que sus compañeros heterosexuales.