The Batman se estrena este jueves 3 de marzo y se presenta como una de las cintas más esperadas del año
En The Batman podemos encontrar varios mensajes e interpretaciones sobre la oscuridad, la maldad y la lucha por el bien en la sociedad.
La nueva cinta de Batman dirigida por Matt Reeves y protagonizada por Robert Pattinson se ha llevado las palmas por la crítica, antes de su estreno oficial las personas que han podido ver la cinta concluyen en que se trata de una versión muy fiel al cómic y esencia del personaje en un tono detectivesco propio de las novelas gráficas de Frank Miller.
Año Uno de Frank Miller es traída a colación debido a la trama y las similitudes que existen con esta obra cinematográfica, en esta Wayne se vuelve un justiciero y se muestra el paso de un hombre que busca hacer justicia a un personaje más complejo y completo.
En el cine podemos ver un personaje que comienza como superhéroe, pero la cinta ahorra el ya revisado origen del personaje, todos sabemos que los padres de Bruce Wayne fueron asesinados por un ladrón a la salida de la ópera. El aprendiz se hace presente, lleno de cicatrices y notas de diario, sigue aprendiendo a hacer las cosas, no termina de entender, pero no abandona del todo.
En esta ocasión vemos un Batman oscuro al estilo Joker, en ese paralelismo cinematográfico, se muestra un poco de la brutalidad que para nada caracteriza al personaje, un superhéroe que busca venganza, y así se hace llamar, eso personifica, la propia venganza contra los malos de la ciudad y en general contra la violencia que le quitó la vida a sus padres.
Robert Pattinson llega a Ciudad Gótica con un gran peso bajo los hombros y es que estar dentro de la máscara, la capa y la Baticueva no es nada sencillo, grandes actores han hecho muy buenos trabajos como el caballero de la noche, y otros no tanto, pero parece que el estigma del personaje los ha acompañado durante toda su carrera, pocos son los que se logran quitar es de encima.
Pattinson también viene cargando un peso fuerte desde que apareció en la famosa saga Crepúsculo, una serie de películas que no dejaron que Robert fuera tomado en serio a pesar de sus actuaciones como la de El Faro junto a Willem Dafoe en la que se consagra como un actor destacado y que debe de tomarse en serio, fue entonces que se le presenta este proyecto dirigido por Matt Reeves, un director que no ha encontrado esa chispa con materiales destacados, algo de lo más glorioso de él fue Cloverfield que mucha gente no valoró en su momento.
Pattinson traslada esa negatividad y aparente pesimismo de Batman a Bruce Wayne, por lo que no existe una diferencia entre estos alter egos, como si se ha llegado a ver en otras versiones, esto puede pretenderse como una manera de dar a entender el poco control del personaje contra sus dos vidas.
Con The Batman se presentan consagraciones cinematográficas y es que el director presenta un retrato que intercala en la primera persona, nosotros somos Batman y es que nos ponemos en los ojos del protagonista y sentimos es desprecio al inicio cuando lo tachan de un bicho raro; la primera película que aborda un Batman nada querido y que comienza a tener la confianza del Comisionado Gordon, un personaje que sirve de puente entre la gente y Batman.
Entre sombras y rabia se nos presenta un Batman que no le importa la venganza, pero también la justicia y es ese encuentro con ella que el personaje también aparece como un aprendiz de la vida, este es Batman más joven que nos presentan en la pantalla grande y que comete errores, no esperemos ver a un murciélago que aterriza con estilo, aquí falla y se levanta y aprende de eso, es un personaje que sufre, pero que se dedica a ayudar, con cierta desconfianza al principio, pero se integra bien desde el inicio con Catwoman, interpretada por Zoe Kravitz.
Zoe hace un retrato muy fiel de Selina Kyle como una antagonista que pone a pensar al enmascarado, este personaje funciona en gran parte como el detonante y hasta pareciera que las motivaciones para ir por el camino del bien, al final una gran decisión hace que Batman sepa elegir entre el amor y una ciudad.
No esperemos un glamuroso Bruce Wayne como magnate, filántropo y galán con las mujeres, hasta cierto punto es la versión oscura del personaje que trata de tener un equilibrio entre la luz y las sombras. La cinta es demasiado oscura y no solo en la trama, las escenas se mantienen en la penumbra mucho tiempo, haciendo que el espectador se acostumbre a la noche, el propio Bruce tiene que usar lentes oscuros para esa luz que lo lastima y es que así pretende vivir la vida, lejos de lo visible y más tiempo en la penumbra, esto va cambiando a lo largo de la cinta y cuando el personaje logra la confianza al interactuar con el Pingüino de Colin Farrell en una excelente escena de acción y persecución del Batimóvil; al final Batman observa el amanecer de un nuevo día, una nueva etapa en su vida, el paso de un vengador a un justiciero.
Un Batman nuevo que lucha solo contra la maldad de la ciudad y que con mucha impotencia y un sentimiento de que nunca se terminará lo malo, se puede ver la esperanza de Batman en que podrá con todo; esta es un película real que aborda un personaje fuera de la perfección, un hombre que no puede esta en todos lados luchando contra el crimen.
El papel del Acertijo es muy importante para el desarrollo de nuestro Batman, un gran villano merece un héroe a la altura, Paul Dano interpreta a un malo que no pide nada a ningún Joker, que hasta cierto momento hace referencias al loco de Arkham, el Acertijo se presenta como esa lucha de Batman contra el mal y con el bien, por un momento se pone en duda sobre la bondad del personaje y es que al no estar desarrollado pudo haber caído del lado de la maldad, sin embargo gracias a los personajes incidentales como Alfred es que el protagonista no termina por caer en el abismo de la maldad y la oscuridad total.
Y es que el personaje se presenta como las sombras bajo una musicalización exquisita de la mano de Something in the way de Nirvana y un soundtrack de Michael Giacchino que presenta la música como un elemento más y muy importante para entender la evolución del personaje. Las cicatrices como recordatorio de lo vivido, pero también lo aprendido se muestran en un personaje que espera ese desarrollo.
La película representa muy bien a Ciudad Gótica como se ha llegado a referir en los cómics y novelas gráficas, la ciudad es un personaje más, el más importante para mi gusto, ya que es quien más desarrolla al personaje y es que el pueblo va acompañado de sus pobladores, los habitantes como parte de dicha ciudad en un solo personaje que golpea constantemente al Caballero de la Noche, pero que en esa relación de amor y odio que tiene el personaje con su lugar de nacimiento se muestra la confianza que le da la ciudad, en ese momento nace el Batman que todos conocemos, al momento en que la gente literalmente lo sigue es cuando conoces a ese personaje de toda la vida y que ahora vimos en una etapa temprana.
Esta película no pretende competir contra la trilogía de Nolan, no se arriesga a ir por ese camino, toma su propio género, personaje y origen para contarnos la misma historia de una manera distinta sin caer en el cliché sobre Batman, es verdad que nos ha mostrado algo ya visto en el cine, pero no de la mano de el Caballero Oscuro.
