Si vives en México seguro te ha pasado que has escuchado sobre la contingencia ambiental, por lo que te recomiendan no salir de casa e incluso se prohibe a algunos autos circular. Pero ¿cómo protegernos realmente de la contaminación ambiental?
De acuerdo con la Real Academia Española (RAE), la contaminación es la introducción directa o indirecta, mediante la actividad humana, de sustancias, vibraciones, calor, o ruido en la atmósfera, agua o suelo que pueden tener efectos perjudiciales para la salud humana o la calidad del medio ambiente, o que pueden causar daño a los bienes materiales o deteriorar o perjudicar el disfrute u otras utilizaciones legítimas del medio ambiente. En resumen, toda materia que generamos o manipulamos que causa un daño en el planeta. A partir de este concepto podemos encontrar varios partiendo de la misma base, como la contaminación marina, acústica, hídrica, visual, entre muchas otras, pero la que importa hoy, la contaminación ambiental.
La Organización Mundial de Salud (OMS) asegura que nueve de cada diez personas del mundo respiran aire contaminado . Sus datos muestran que 7 millones de personas mueren cada año por la contaminación ambiental encontrada tanto en exteriores como en interiores. Se trata de la exposición a partículas finas contenidas en el aire contaminado que penetran en nuestros pulmones y sistema cardiovascular, provocando enfermedades como cáncer de pulmón, infecciones respiratorias, accidentes cerebrovasculares, cardiopatías, entre otras. Esto se da principalmente en países de ingresos bajos y medianos.
Causas de la contaminación ambiental
Existen muchas formas con la que podemos contaminar el medio ambiente, a continuación te diremos las más dañinas.
Los desechos industriales y domésticos: El consumo masivo provoca que procesos industriales pasen por alto al cuidado del medio ambiente. De acuerdo con Ecología Verde, estos son generados por disolventes, pilas, pinturas, baterías, tintas, escombros, materiales químicos, productos corrosivos y plásticos contaminados.
Combustibles fósiles: De acuerdo con Ecologistas en Acción, el gas, el petróleo, el carbón y la gasolina son combustibles fósiles. Es por el uso de estos que cuando hay contingencia ambiental se lleva a cabo el “Hoy no circula”, para evitar la quema de este tipo de contaminantes.
Altos índices de basura: El consumo de bienes y servicios genera un alto nivel de residuos, entre más causamos, más daño generamos a la tierra. A pesar de que se tienen nuevas iniciativas para reciclar y disminuir este tipo de residuos, Green Peace nos dice que no todo el plástico se puede reciclar y que estamos reciclando menos del 10% del plástico que generamos.
Pesticidas y productos químicos: Los productos utilizados para la agricultura y la industria liberan grandes cantidades de gases con efectos nocivos para el medio ambiente, además de contaminar suelos de cultivo y fuentes de agua. La Organización Mundial de Salud señala el riesgo de utilizar sustancias químicas como los plaguicidas, debido a su capacidad de permanecer en el agua y suelo durante años (de igual manera pueden resultar tóxicos para el ser humano).
¿Cómo podemos protegernos de la contaminación ambiental?
El Instituto Nacional de Salud Pública nos recomienda tomar algunas medidas para evitar un posible daño a nuestra salud:
- Evitar el ejercicio, si te agotas y aumentas tus niveles de respiración también incrementaran los contaminantes inhalados.
- Si te encuentras cerca de un incendio, coloca toallas húmedas en las ranuras de puertas y ventanas.
- Evita la cocción de alimentos con leña o carbón.
- Evita realizar actividades al aire libre (de todo tipo).
- Hidrátate continuamente tomando al menos 1.5 litros de agua.
- Evita utilizar lentes de contacto.
- Si haces uso de aire acondicionado asegúrate de ponerlo en modo “recirculación”.
- Puedes utilizar mascaras N95, N96 y N99 (no mascarillas quirúrgicas).
- Lava tu cara con frecuencia, las partículas contaminantes penetran ahogando los poros y otorgando un aspecto amarillento y opaco en la piel. realiza una limpieza neutra diario por la mañana y por la noche.
- Si vas a salir, en medida de lo posible, hazlo a horas menos concurridas e intenta encontrar rutas menos transitadas.
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