La música se ha convertido en uno de los contenidos más consumidos durante esta contingencia, en que vivimos toda clase de desafíos como el mantenernos en resguardo por la situación que estamos viviendo y que se ha convertido en una pauta de gran valor para todas las personas, al tener que desarrollar hábitos para concentrarse en el trabajo o actividades que nos liberen del estrés.
En medio de estos esfuerzos, un elemento que no tenemos que perder de vista es el que nos marca la oportunidad detrás del consumo de música, sobre todo por el valor que han encontrado ciertas plataformas en ofrecer una amplia variedad musical, por el interés que han encontrado las personas durante esta época.
Frente a este escenario, un elemento que no podemos perder de vista es el que nos advierte el rol que hoy en día juegan los consumidores y que marca el interés que tienen las personas.
Los retos de la contingencia
La contingencia se ha convertido en un momento clave que ha establecido nuevos hábitos de consumo de contenidos, pues esto determina elementos que nos ha permitido aprovechar de mejor forma la cuarentena que estamos enfrentando.
Un elemento que no podemos perder de vista es el que nos advierte la oportunidad que tienen las audiencias, de acceder a contenido que se ha convertido en el mejor referente durante esta contingencia, en que tenemos que formar nuevos hábitos como los que advierten el valor que han encontrado las marcas.
Dicho esto, un aspecto que no podemos perder de vista es el que nos advierte la oportunidad que han encontrado las marcas en poder comunicarse a través de esta oferta, lo que ha impuesto nuevos hábitos.
Música para trabajar y el ocio
El ocio y el trabajo se han convertido en aspectos clave durante esta contingencia, en que nos enfrentamos a un resguardo que tiene que sacar los mejores hábitos de nuestra parte, para poder trabajar a distancia o poder escuchar música con diversos objetivos, como el poder mantener niveles de estrés y ansiedad bajos.