De acuerdo con Servicio Nacional del Empleo las bienes raíces están entre las cinco carreras más demandadas. Y al igual que la mayoría de las carreras, crear una buena reputación alrededor de la imagen del profesional es crucial para cualquier asesor inmobiliario.
Construir una buena reputación al respecto se traducirá en incrementar la confianza entre los clientes actuales así como mejorar las oportunidades para llegar nuevos prospectos.
Cuidar la imagen profesional del asesor inmobiliario supone trabajar obre diversos aspectos, en donde quizá uno de los más básicos, pero representativos es la ortografía.
Cuando menos así lo refiere Jorge Letayf, director de Mercadotecnia de RE/MAX México, quien enlista seis errores ortográficos que como asesor inmobiliario no puede cometer.
1) Uso de mayúsculas
Además de que se considera un error de formato para muchos espacios de comunicación, escribir mayúsculas puede ser leído por el receptor como un grito, lo que jo siempre será bien recibido.
Por eso se recomienda utilizar mayúsculas solo en estas situaciones:
- Al principio de un escrito.
- Después de punto y seguido, punto y aparte.
- Al escribir nombres propios y los nombres dados a animales.
- Todos los nombres geográficos.
- Sobrenombres.
- Los títulos de obras: “El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha.”
- Títulos de dependencias gubernamentales o departamentos empresariales (Secretaria, Gerente de Ventas, etc.)
- Números romanos.
- Nombres de Instituciones.
- Nombres de las ciencias: Biología, Psicología, etc.
- Y por último, las mayúsculas sí se acentúan.
2) Haber y A ver
Es importante entender que una se refiere a una expresión de expectativa: “A ver cuándo me pagan”, “A ver qué pasa”, mientras que otra se relaciona con una solicitud para mirar u observar algo: “¿A ver?” Se emplea al principio de una orden o llamada de atención: “A ver, ¡ya basta!”, “A ver, ven aquí”.
Haber es un verbo en infinitivo y se utiliza como auxiliar seguido de un participio: “De haber sabido”, “No sé qué pude haber hecho”. También es un sustantivo que significa el conjunto de bienes o pertenencias de una persona: “Tiene muchos libros en su haber”.
3) Los porqués
Existen cuatro formas distantes de emplear la expresión:
- Porque: conjunción para expresar causa. Ejemplo: “Me pidió dinero porque le robaron la cartera”.
- Porqué: sustantivo que significa causa, motivo o razón. Ejemplo: “Nos dedicamos a filosofar del porqué de nuestra existencia”.
- Por qué: preposición seguida de la interrogación o exclamación qué. Ejemplo: “¿Por qué cancelaste la reunión?”
- Por que: preposición seguida de la conjunción subordinante que. Ejemplo: “Votamos por que se restituyan las reglas vecinales del año pasado”.
4) La “N” y “M”
Siempre coloca “M” antes de “B” o “P” y la letra “N” siempre antes de “V”.
5) Uso de la “Z”
La letra “Z” se puede utilizar con todas las vocales menos con la “E” y con la “I”. En estos casos la “Z” se sustituye por la letra “C”.
6) Uso de la coma
Una coma puede ser una pausa:
- No, espere.
- No esperé.
Puede desaparecer tu dinero:
- $23,400
- $2,340
Puede condenar o salvar:
- ¡No tenga clemencia!
- ¡No, tenga clemencia!
Puede cambiar una opinión:
- No queremos saber.
- No, queremos saber.
Puede ser la solución:
- Vamos a perder, muy poco se resolvió.
- Vamos a perder muy poco, se resolvió.