Cuando el coronavirus comenzó a ser una preocupación en todo el mundo, las medidas de prevención y limpieza fueron de los temas más importantes, y ante la incógnita de cómo es mejor tener las manos limpias, un estudio arrojó que los secadores automáticos son peligrosos frente a este virus.
Pues resulta, que una vez que las personas se lavan las manos vigorosamente con agua y jabón, al momento de recurrir a los secadores de manos, estos aparatos expulsan aire a una velocidad considerable, enviando todas las partículas y las gotas en todas direcciones.
Esta conclusión llegó a cargo de una investigación del medio especializado Wired, pues la velocidad de expulsión del aire en estos secadores es de aproximadamente 420 millas por hora, lo que puede mandar a volar todas las partículas que hayan en nuestras manos.
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Además, un estudio realizado en el 2018 por la Sociedad Americana de Microbiología, encontró que los patógenos y las esporas podrían dispararse por los edificios y depositarse en las manos a través de los secadores automáticos, y depositarse en la ropa de las personas.
Es decir, si una persona que tenga el coronavirus, o posea el virus en sus manos sin darse cuenta, al momento de lavarse las manos y secarse con estas máquinas, todas las partículas depositadas en sus manos serán esparcidas a un radio de poco más de un metro, infectando otras superficies y personas.
Aunque estos estudios comprobaron que diferentes tipos de virus son esparcidos de esta manera, ¿realmente funciona igual con el COVID-19? Pues el medio Wired lo confirmó.
De acuerdo con declaraciones de un bioquímico de la Universidad de Connecticut, Peter Setlow, comentó que este tipo de esporas como la del coronavirus si se pueden esparcir por estos medios. “Lo siento, industria de secadores de manos. Mi opinión personal es que no deberían usarse” sentenció el especialista.
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Sin embargo, hay que ponerse a dudar un poco sobre esta afirmación, pues el estudio de la Sociedad Americana de Microbiología hizo el experimento exponiendo las manos de las personas durante 1 minuto y medio, algo que ninguna persona normal haría, pues la mayoría de los usuarios se exponen por mucho menos tiempo.
Pero ante las afirmaciones y los posibles contagios de COVID-19, los artículos científicos indican que la mejor opción es secarse las manos con toallas de papel, pues las bacterias quedarán únicamente en ese material, y no se esparcen.
Mejor prevenir que lamentar.
